La Fundación Rafael Bernabeu entrega los premios del 2º concurso de fotografía con motivo del cáncer ginecológico

En un acto lleno de emotividad se celebraba en la tarde del 31 de octubre la entrega de los premios del 2º Concurso de Fotografía con motivo del mes del cáncer ginecológico organizado por la Fundación Rafael Bernabeu Obra Social. El evento ha tenido lugar en el Auditorio de Instituto Bernabeu y entre el público asistente, buena parte de los autores de las fotografías que han participado en el concurso.

Sómnica Bernabeu, en representación de la Fundación, hacía entrega de las distinciones a los 10 finalistas y premiados. El primer premio, dotado con 400 euros, ha recaído en Diana Megías Oliva con su imagen titulada “Otro día más en el ring”; el segundo galardón, dotado con 300 euros, se ha otorgado a Damián García Moraleda con la imagen que lleva por título “El amor incondicional hacia la mujer es la mejor ayuda contra la enfermedad“ y el tercer premio, dotado con 100 euros, es para Alicia Lamarca Auer con “Mostrar la belleza que tiene el rostro de una mujer que lucha por curarse y la fuerza de quien se agarra a la vida con ilusión”.

Escenas de superación, de apoyo incondicional o de resistencia en los peores momentos conforman algunas de las imágenes que han participado en este certamen que se consolida en el calendario de la Fundación Rafael Bernabeu. Y los participantes lo han hecho bajo el lema y hashtag #SentirQueMeQuieres, una declaración de intenciones de la Fundación que quiere dar visibilidad y apoyar las mujeres, en especial a aquellas que están luchando contra una enfermedad.

La imágenes ganadoras y finalistas están expuestas para el público general hasta el 15 de diciembre en la cafetería de Instituto Bernabeu.

La Fundación Rafael Bernabeu Obra Social tiene una especial sensibilidad con los temas sociales. La entidad ofrece de forma gratuita la preservación de los ovocitos previamente al tratamiento oncológico de mujeres que sufren un cáncer. Actualmente hay un incremento de los casos, se logra una alta supervivencia pero, a cambio de perder la fertilidad por los efectos de la quimioterapia. Antes de iniciar la terapia se realiza la estimulación del ovario, la recogida de los ovocitos y su posterior congelación y custodia para que, tras la curación la mujer, pueda optar a ser madre.